Las pirámides. Más de uno se quedaría con la mosca detrás de la oreja cuando dije que no son tumbas. Pues no, no todas son tumbas. Hay muchas que sí lo son, como la pirámide de Zoser, en la necrópolis de Saqqara. Una tumba piramidal construida por el divinizado Imhotep: sabio, médico, astrónomo y considerado el primer arquitecto de la historia. Tal vez os suene ese nombre, porque es el antagonista principal en la película La Momia. Pero bueno, pero si estas grandes pirámides no son tumbas, ¿qué son? Ésa es la pregunta que se llevan haciendo cientos de personas durante décadas. Nadie lo sabe con seguridad. Entonces, ¿por qué digo que no son tumbas? Porque no cumplen ni una sola de las características de los edificios funerarios del período de la IV Dinastía, supuestamente la época en la que se levantaron las pirámides. Se ha dicho siempre que son los enterramientos de tres generaciones de faraones de esa dinastía: Keops, Kefrén y Micerinos. Sin embargo, no se ha encontrado en su interior nada que permita decir que es una tumba... a excepción de un sarcófago. Para muchos esto es concluyente: si hay un sarcófago, ¿qué más pruebas se necesitan? Eso es lo que dicen todos los egiptólogos, sin tener en cuenta que no hay ni tesoro funerario, ni pinturas rituales ni textos en las paredes ni nada... Defienden que la momia y los tesoros fueron saqueados por los ladrones de tumbas hace ya muchos siglos. Y eso es una explicación lógica, sin duda. De todas maneras, si las pirámides son de la IV Dinastía, eso quiere decir que estamos en torno al año 2600 a.C., mientras que la I Dinastía ronda el 3000 a.C. Es decir, unos 400 años de diferencia. 400 años para darse cuenta de que usar una enorme pirámide en mitad del desierto como tumba no es muy discreto, ¿verdad? Los ladrones de tumbas eran un problema ya en los primeros tiempos, ¿por qué los faraones seguirían eligiendo enterrarse con todos sus tesoros en enormes moles de piedra en mitad de la nada? No tiene mucho sentido. Muy bien, ¿cómo se explica entonces la presencia del sarcófago? Muy fácil. La cámara donde se encontraba el sarcófago era una estancia ritual. Nos puede resultar un poco difícil de entender cómo un sarcófago puede tener un fin ritual, pero es cierto. Muchos de los faraones (entre ellos los propios Keops, Kefrén y Micerinos) utilizaron la cámara del sarcófago de la Gran Pirámide en una especie de ceremonia de renovación de su reinado. Esta ceremonia se conocía como Heb Sed, Fiesta Sed o Fiesta de la Renovación Real; y probablemente era la más importante celebración de los soberanos del antiguo Egipto. El propósito de este ritual era la renovación de la fuerza física y la energía sobrenatural del faraón. Y parte de este Heb Sed consistía en permanecer una noche en el interior del sarcófago de la Gran Pirámide.
El faraón tenía que pasar una noche a solas tumbado en el interior del sarcófago de la Gran Pirámide, y eso se sabe desde los tiempos de Heródoto, en el siglo V a.C. Por eso, cuando figuras como Alejandro Magno, Julio César o Napoleón Bonaparte llegaron a Egipto, quisieron hacer el mismo rito que los antiguos faraones. Y lo hicieron. Se dice que todos los que pasaban por ese rito tenían una epifanía, una revelación de Dios. Cuando la puerta de la Gran Pirámide se cierra, el iniciado queda completamente aislado del mundo. No ve nada, no oye nada... al poco tiempo deja de sentir nada. En la actualidad la CIA utiliza algo parecido: son los llamados tanques de privación sensorial. Claro que la Agencia los usa para torturas e interrogatorios. Pero en el caso de la Gran Pirámide, al privar al iniciado de sus sentidos se busca despertar esa visión cósmica. En otras palabras, si te privan totalmente de tus sentidos y no recibes ningún estímulo exterior en un periodo largo de tiempo, tu cerebro hace que empieces a alucinar. Ahora bien, ¿qué "vieron" todos los que pasaron la prueba? Nunca se supo. Ni Alejandro ni César dejaron nada escrito. En cuanto a Napoleón, cuando al día siguiente sus soldados fueron a buscarle al exterior de la pirámide y le preguntaron por su experiencia, Napoleón sólo dijo una frase: "si os contase lo que he visto, ninguno de vosotros me creería." Y nunca se lo contó a nadie. También es significativo el hecho de que después de esa experiencia y su campaña en Egipto, Napoleón incorporase a su ejército a los mamelucos, una secta militar-religiosa de monjes guerreros; o que a su regreso a París tratase de convertir la capital en una ciudad egipcia, plagando ambas orillas del Sena con pirámides, esfinges, obeliscos... Tras ese rito de paso en la Gran Pirámide, Napoleón se convirtió en un devoto de Egipto. Incluso se inició en la masonería, en una logia francesa llamada precisamente "Del Hermes Egipcio", junto a su padre y su hermano.
No tengo la menor idea sobre qué vio Bonaparte, pero debió ser algo realmente impactante. La última persona que ha pasado una noche en el interior de la Gran Pirámide, hasta donde yo tengo noticia, es el escritor y periodista Javier Sierra. Cuando estaba escribiendo La Pirámide Inmortal consiguió permiso de las autoridades de El Cairo para pasar la noche en la mal llamada "cámara funeraria". Por supuesto, al salir tampoco dijo a nadie lo que había visto, y no sabemos si lo contará algún día. El caso es que cuando le preguntaron sobre esta experiencia, en una entrevista, también contestó con una frase: "nunca volvería a pasar otra noche en el interior de la Gran Pirámide". Dan ganas de pasar por ello, y al mismo tiempo da repelús hacerlo. Es lo normal con las pruebas iniciáticas. Imaginad que tenéis que pasar una noche completamente solos en esta cámara, tumbados en ese sarcófago. Hay gente que se lo pensaría un par de veces o tres.
Ahí es donde se tumbaban. Estamos contemplando la llamada "Cámara del Rey" y el llamado "Sarcófago de Keops". Supuestamente el lugar más importante de toda la pirámide... decidme, ¿da la sensación de ser el lugar de eterno reposo de un faraón de fama universal? Pues no. Parece más bien de mentira. Casi parece que en ese sarcófago es imposible que pueda caber una persona, mucho menos pasar 12 horas seguidas ahí metido, pero de hecho es perfectamente factible, como han demostrado muchos turistas que han pasado por la Gran Pirámide y han querido hacer la gracieta.
Tumbarse en el sarcófago tres minutos para hacerse la foto está muy bien. Pero dile a cualquiera de ellos que tienen que pasar la noche totalmente solos tumbados en el sarcófago y con la pirámide sellada. A ver cuántos quieren quedarse. Yo lo harías. Lo pasaría mal, estoy seguro, pero tiene que ser una experiencia... inefable. Ahora bien, surge una pregunta. Si esta es la "Cámara del rey", el sarcófago de Keops y todo eso que dice la egiptología oficial, ¿de dónde lo han sacado? Porque esta cámara no parece ni muchísimo menos el enterramiento de un rey. Y eso es porque no lo es. Además, tenemos que recordar que las pirámides hoy en día están con la piedra desnuda, pero en su época estaban cubiertas con mármol y piedra caliza de color blanco, mientras que en la cima lucían una pieza triangular, el llamado pyramidion, que era de oro. Imaginad la imagen de las tres pirámides, brillando. Todo un reclamo para los ladrones de tumbas... si esto fuera una tumba. Pero no, las pirámides siempre han sido símbolos de ascensión, de convergencia hacia lo alto, de conexión con la divinidad. ¿De dónde sacaron los egiptólogos la idea de que ésta es la tumba de Keops? Pues esa historia es muy interesante. Antes de nada, permitidme presentaros a Richard Howard Vyse.
Vyse es quien descubrió que la Gran Pirámide había sido erigida por el faraón Keops. Lo sé, he dicho que la pirámide es anterior a Keops. Vamos por partes. Vyse era un general británico y egiptólogo que estuvo realizando excavaciones den la Gran Pirámide a principios del siglo XIX. No voy a entrar en la controversia ni en las disputas que existen actualmente y que mantienen personas mucho más entendidas en la materia que yo. Simplemente voy a contar los hechos: Vyse estuvo muchos años en la Gran Pirámide sin obtener resultados significativos. No encontraba tesoros ni nada que pudiese contentar a los británicos, y el Parlamento había destinado mucho dinero a la expedición. Y entonces, justo cuando quedaban tres semanas para que el cónsul británico en Egipto le retirase la financiación (y probablemente le echase una buena bronca), Vyse descubrió en uno de los muros una pintura con el cartucho de Keops. Es decir, el nombre del faraón en escritura jeroglífica. Qué suerte para él. Muy conveniente, de hecho. Tanto, que hay mucha gente que no se lo cree. Se dice que Vyse, al ver que se iba a quedar sin dinero y que iba a haber represalias por haber gastado el dinero de la Corona sin resultados, falsificó el cartucho. Y así se convirtió en uno de los mayores descubrimientos de la arqueología. Yo no digo nada. Sólo dejo esto aquí, y que cada uno piense lo que quiera. La primera imagen es uno de los cartuchos reales de Keops (Jufru) encontrado en otras edificaciones. El segundo es la pintura que se encuentra en una sala de carga de la Gran Pirámide.
Si se dice que esta pintura es una falsificación (considerando que está en un lugar bastante inaccesible en vez de estar en un lugar vistoso; y pintado en vez de esculpido en la roca, que es lo que solían hacer, puesto que la pintura dura mucho menos y los faraones solían mostrar claramente lo que habían construido), ¿quién construyó la Gran Pirámide? Tranquilos, que nadie va a empezar a hablar de alienígenas. Al "quién" no puedo responder porque estaríamos hablando del Período Predinástico, y ahí hay muchas sombras. Pero sí puedo decir el "cuándo", que evidentemente es anterior al 2500 a.C. ¿Cuándo se dice que fue construida? Hace 80.000 años. Sí, lo sé, parece un despropósito... si no fuese por unos experimentos geológicos llevados a cabo a principios de este mismo año. Mirad el estado de conservación de la piedra de la Gran Pirámide.
No parece que esté muy mal, y en efecto no lo estaría si estuviésemos en un clima continental. De ser así, el desgaste de la piedra sería lógico. El problema es que nos encontramos en pleno desierto, y aquí no hay inclemencias climatológicas suficientes para que la Gran Pirámide presente ese desgaste. Y lo mismo se puede decir de su vecina, la famosa y enigmática Esfinge.
¿Entonces cómo se explica ese desgaste? ¿Dándole una antigüedad de 80.000 años? El estudio geológico así lo dice. Según el trabajo sobre la piedra realizado por un par de geólogos de la Universidad de Estocolmo, para que presenten ese tipo de erosión ambas estructuras no han sufrido las inclemencias del viento, sino del agua. Es decir, ha tenido que llover abundantemente para que la roca muestre esa descomposición. ¿Y cuándo fue la última vez que llovió de manera tan brutal en Egipto hasta el punto de que el desierto de Gizeh se inundase? Pues tras la última glaciación, que comenzó hace 110.000 años y que tuvo su apogeo hace 20.000 años. La región del desierto de Gizeh quedó totalmente anegada por las aguas... y las piedras que forman tanto la Esfinge como la Gran Pirámide sufrieron esa tempestad. Parece imposible que esto lleve en pie tanto tiempo, pero los estudios geológicos así lo demuestran. Sin embargo, como en todas partes, hay defensores y detractores. Yo aquí no quiero convencer a nadie de nada, solamente que sepáis que estos datos existen, y están ahí. Para terminar con la entrada quiero dar a conocer otra de las pruebas de que la Gran Pirámide y la Esfinge estaban allí mucho antes del reinado del faraón Keops. Se trata de la conocida como Estela del Inventario.
Se trata de una estela que se encontraba en el Museo Egipcio de El Cairo y que se dice que ahora ha desaparecido por los expolios habidos durante la Revolución Árabe en la primavera de 2011. En esta estela se leía lo siguiente:
"Viva Horus Mezer, el Rey del Alto y Bajo Egipto, Khufu (Keops), dador de vida.
Él (Keops) encontró la Casa de Isis, señora de la Pirámide, por el lado de la
cavidad de la Esfinge, o en el oeste de la Casa de Osiris, Señor de Rosta, y él
construyó una pirámide para la hija del Rey, Henutsen, al lado de este templo... (...)"
Pero no sólo eso, en la misma Estela se asegura que Keops realizó una de las reconstrucciones de la Esfinge, y de nuevo, que la Gran Pirámide es en realidad un templo dedicado a Isis en tiempos remotos. Algo no cuadra, ¿verdad? Sobre todo teniendo en cuenta que la ortodoxia defiende que la Esfinge fue erigida en tiempos del faraón Kefrén, posterior al reinado de Keops. Pero Robert Schoch, geólogo de la Universidad de Boston, afirma en sus informes de 1993 que "la superficie de la roca que rodea el complejo de la Esfinge posee restos de una erosión producida por el agua hace 9000 años, con lo que certifico geológicamente que su antigüedad no puede ser menor."
El estudio geológico arriba mencionado se ha realizado a principios de este año, por lo que gracias a las técnicas modernas se ha situado la construcción de la Esfinge y de la Gran Pirámide hace 80.000 años. ¿Quién estaba en Egipto en esa época? Hagamos una pequeña cronología de nuestro planeta. La Tierra se formó hace 4.600 millones de años. Hace 3.800 millones de años aparecieron las primeras bacterias. Hace 1.500 millones de años aparece en el mar la vida vegetal. Los dinosaurios vivieron hace 200 millones de años. Los simios evolucionaron hace 40 millones de años. Y los primeros homínidos aparecieron hace 4 millones de años. El Homo Sapiens Sapiens (es decir, nosotros), comparte época con el Homo Sapiens Neanderthalensis, que se extinguió hace 90.000 de años. Y 10.000 años después, durante el Paleolítico Medio, alguien levanta estas grandes edificaciones en la tierra del Nilo. ¿Quién? Pues tal vez los Semsu-Hor. Un grupo digno de estudio, pero del que ya hablaremos en la próxima entrada. Hemos dicho que esto no iba a ser muy largo y, una vez más, nos hemos pasado. Alguno me preguntará si de verdad me creo todo lo que he dicho hoy. Me cuesta mucho creerlo, no digo que no. Pero lo que nunca debemos hacer es cerrarnos a nuevas posibilidades, por muy locas que suenen. Muchísimos investigadores fueron tachados de locos por cosas que decían y que luego resultaron ser ciertas. ¿Cómo creéis que consideraron a Schliemann cuando pregonó que estaba dispuesto a encontrar Troya, la "mítica" ciudad de Homero? ¿O qué reacción pensáis que tuvieron los contemporáneos de Darwin cuando éste publicó que descendíamos del mono? ¿Qué me decís de la reacción de la gente al leer las obras de Copérnico, Galileo y Kepler, que revolucionaban el sistema astronómico por completo? Aún así esto resulta imposible, o al menos muy difícil, de creer. Pero si se demuestra la veracidad de todo esto, dentro de unos cuantos siglos los estudiantes de entonces creerán que éramos estúpidos al no darnos cuenta de cómo eran realmente las cosas. Siempre ha sido así, y siempre lo será. En fin, ya es suficiente por hoy. Queridos lectores, si habéis llegado hasta aquí os felicito y os pido perdón por haberos robado tanto tiempo. El sábado (si todo va bien) volveremos para hablar de los Semsu-Hor. ¡Hasta la próxima, lectores, y gracias!
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